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Debido a la baja incidencia de 49,41 casos positivos por cada 100.000 habitantes, las Islas Baleares ya se consideran una zona de bajo riesgo para las infecciones por COVID-19, a partir de 50 casos existe un riesgo medio. En Mallorca e Ibiza todavía existe un riesgo medio de contagio, con tendencia a ser demasiado bajo.
La incidencia acumulada 14 días después del primero es 50,89 y la del segundo 54,09. Baleares ya ha bajado de este nivel debido a la buena situación epidemiológica de Menorca, cuya incidencia es de 8,57 a 14 días. Formentera tiene un valor de 8,26. Ambas islas se encuentran en lo que se conoce como la "nueva normalidad" de contagio.
La tasa de contagio en las Islas Baleares sigue debilitándose ya que la incidencia es de 21,92 a los siete días. Se espera que continúe la tendencia a la baja en todos los países excepto Menorca, cuya incidencia es de 5,35 a los siete días.
Según la presidenta del Gobierno Francina Armengol, la tribu británica debería representar el 73% de los contagios en las islas y también hay nuevas variantes en Ibiza, incluidas las de la tribu californiana. Dado que la situación epidemiológica ha empeorado en otros países, las medidas de desescalamiento deberían progresar lentamente. Las medidas serán aprobadas por un consejo de gobierno extraordinario el próximo viernes.
En Mallorca, los centros comerciales e instalaciones con una superficie de más de 700 metros cuadrados ya abren los sábados, así como los interiores de bares y restaurantes a partir del próximo lunes.
